lunes, 28 de marzo de 2011

19 paredes blancas

Su casa es blanca y con luz, muchísima luz, de esa que te encandila al abrir los ojos y te obliga a cerrarlos al segundo. El sol acaricia las paredes blancas y por ahora vacías de la casa de María.
Que lindo María se mudó con nadie más que ella. (¡Qué es un montón! ¿No?).
Se la ve linda, o debería decir más linda. Se la ve libre, más liviana.
Mil cosas, debe tener en la cabeza pero solo son de ella. No tiene que dar explicaciones de nada a nadie, cuelga las carteras donde quiere.
María tiene casa, no puede creer su realidad, siente que es una locura… (No se a que se refiere, ni ella lo sabe)
María se arriesgó a no tener a nadie para echarle la culpa y menos que menos para aplaudir de pie, más que a ella misma, por lo menos mientras este entre sus cuatro paredes, que no son cuatro, son diecinueve.

28-04-09

1 comentario: